Desde hace años que desde el Centro de Humanización de la Salud estamos proyectando una nueva modalidad de servicio para quien sufre situaciones como las que este verano estamos viviendo: el accidente del autobús en Avila, el descarrilamiento del tren en Santiago, así como otras situaciones en las que hemos recibido la solicitud de ayuda (algunos suicidios, por ejemplo). Nuestro servicio consistirá en apoyar desde el punto de vista psicológico y espiritual –individual y grupalmente, si es preciso- a personas en momentos de tanto sufrimiento.

Un vehículo adaptado con dos espacios de atención en su interior permitirá que este servicio sea próximo a las necesidades. Apoyar en momentos críticos, informar de recursos existentes, amortiguar el impacto, planificar estrategias de acompañamiento, realizar campañas de sensibilización para una solidaridad competente... serán algunas de las actividades que realizaremos. Aún nos falta terminar de acondicionar el vehículo interna y externamente, el que ahora está en proceso de preparación. Y aún nos faltan algunos recursos económicos para su puesta en marcha. Un servicio muy camiliano, en estrecha relación con la sensibilidad de la Orden de religiosos camilos y la Camilia Taks Force creada hace unos años para intervención en crisis y catástrofes originadas por la naturaleza o por el hombre.

 

VOLVER