Consultado ChatGPT sobre inteligencia artificial y duelo, nos suministra la información que sigue:

“La inteligencia artificial está empezando a desempeñar un papel significativo en el apoyo a las personas en duelo. Aunque es un campo en desarrollo, hay varias formas en las que la inteligencia artificial puede contribuir a este proceso:

1. Asistentes virtuales y chatbots: Estos programas pueden proporcionar apoyo emocional a las personas que están atravesando un duelo. Pueden ofrecer conversaciones empáticas, recordar buenos momentos y proporcionar recursos útiles sobre el manejo del duelo.

2. Análisis de patrones emocionales: La inteligencia artificial puede analizar grandes volúmenes de datos de texto o voz para detectar signos de angustia emocional y ofrecer intervenciones personalizadas. Por ejemplo, pueden identificar cuándo una persona necesita apoyo adicional y sugerir que se comunique con un profesional de salud mental.

3. Aplicaciones de terapia y bienestar: Existen aplicaciones basadas en inteligencia artificial que ofrecen terapia cognitivo-conductual y otras técnicas terapéuticas para ayudar a las personas a procesar su duelo. Estas aplicaciones pueden guiar a los usuarios a través de ejercicios de reflexión y relajación, ayudándolos a manejar su dolor.

4. Realidad virtual y aumentada: Algunas tecnologías de inteligencia artificial están siendo usadas para crear experiencias de realidad virtual o aumentada que pueden ayudar a las personas a decir adiós a sus seres queridos de manera simbólica, lo que puede ser una parte importante del proceso de duelo.

5. Soporte en comunidades online: Plataformas de redes sociales y foros en línea, potenciados por inteligencia artificial, pueden conectar a personas en duelo con comunidades de apoyo, permitiendo que compartan sus experiencias y obtengan consejos de otros que han pasado por situaciones similares.

6. Memorialización digital: La inteligencia artificial puede ayudar a crear memoriales digitales personalizados para honrar y recordar a los seres queridos. Esto puede incluir la creación de videos, álbumes de fotos, y otros recuerdos digitales que las familias y amigos pueden compartir. A pesar de estos avances, es crucial recordar que la inteligencia artificial no puede reemplazar el apoyo humano. La empatía, el entendimiento y el contacto humano son insustituibles, especialmente en momentos de duelo. La inteligencia artificial debe ser vista como una herramienta complementaria que puede ayudar a mejorar el acceso y la calidad del apoyo emocional, pero siempre en combinación con la intervención humana profesional y el apoyo de seres queridos”.

Parece interesante levantar acta d ellos potenciales actuales y cabe pensar que son inimaginables los futuros. No hacemos aquí una valoración ética global, ni una descalificación sistemática de las posibilidades. Sin embargo, como el mismo ChatGPT dice, “la empatía, el entendimiento y el contacto humano son insustituibles, especialmente en momentos de duelo”.

Una valoración personal, en todo caso, parece que es debida por cada quien, para humanizar el uso de la tecnología, centrado siempre en las personas. Paradógicamente, y por primera vez en mi vida, he preguntado (perdóneseme el tono eventualmente narcisista), lo que piensa José Carlos Bermejo sobre el uso de la inteligencia artificial en el duelo y, tras presentarme, correctamente, desde esa parte del curriculum vinculada con la temática, dice:

“Con base en su enfoque, es probable que Bermejo vea la inteligencia artificial en el duelo como una herramienta útil, pero complementaria. Podría destacar que:

1. Complemento, no sustituto: La inteligencia artificial puede ofrecer apoyo adicional y recursos útiles, pero nunca debe reemplazar el contacto humano y la intervención profesional en el acompañamiento del duelo. La relación interpersonal y el apoyo emocional directo son insustituibles.

2. Humanización de la tecnología: Para que la inteligencia artificial sea efectiva en el acompañamiento del duelo, debe diseñarse y utilizarse de manera que respete y promueva la dignidad humana. Esto implica que las interacciones con la inteligencia artificial deben ser empáticas y personalizadas.

3. Cautela en el uso: Bermejo podría abogar por una implementación cuidadosa y ética de la inteligencia artificial, asegurándose de que no se utilice de manera deshumanizadora o que promueva una dependencia excesiva en la tecnología a expensas de la interacción humana.

4. Formación y sensibilización: Es probable que enfatice la necesidad de formar a los profesionales de la salud y el cuidado en el uso adecuado de estas tecnologías, asegurando que comprendan sus limitaciones y potencialidades.

En resumen, José Carlos Bermejo probablemente apoyaría el uso de la inteligencia artificial como una herramienta complementaria en el duelo, siempre que se utilice de manera ética y humanizada, y no reemplace el valioso apoyo humano que es fundamental en estos procesos”.

Por paradójico que pudiera parecer, efectivamente, día de hoy, creo que podría ordenar mi pensamiento de esta forma en la que lo ha hecho ChatGPT, añadiendo en torno a la cautela los posibles riesgos que podamos correr cuando el propio “sistema” realice procesos que no respondan a lo solicitado o esperado por el ser humano; es decir allí donde pudiera emerger una pseudovoluntad o iniciativa que no responda al manejo humano de solicitud de ayuda a la inteligencia artificial. De igual modo cabe decir que se hace necesaria una extrema prudencia en el manejo de la privacidad entregada a la red sobre la propia experiencia de duelo. No sería de menor importancia cuanto pudiera tener que ver con la adicción y el uso de la inteligencia artificial, en una situación tan vulnerable como es la de quien ha perdido por fallecimiento a un ser querido y sufre por ello.

 

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