Es una de las claves de la asistencia sanitaria. Confiar en los profesionales, confiar en uno mismo, confiar en el sistema, confiar en los procesos. La confianza colorea la relación entre profesionales de la salud y los enfermos para una oportuna alianza terapéutica. La confianza es imprescindible en el paciente para adherirse a una estrategia preventiva, someterse a un tratamiento, aceptar un internamiento y generar dinamismos de respuesta positiva.

El que confía, de alguna manera, se entrega, a partir de la realidad mirada en clave positiva y optimista, a lo que no depende solo de uno mismo. La confianza se contagia, se transmite, se cultiva individual y colectivamente.

Se refuerza mediante una buena relación de ayuda. Ponderar las palabras, los gestos y todos los aspectos de la comunicación, son claves fundamentales para hacer nacer o reforzar la confianza, imprescindible en procesos de salud. Sin ella, no somos nada y nos dejamos ir por derroteros negativos.

 

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